El 31 de julio de 2019 se dio el banderazo para el inicio de operaciones del banco de los mexicanos, el Banco del Bienestar, a cargo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, y bajo la dirección general de Rabindranath Salazar Solorio.
El Secretario de Hacienda aclaró que el Banco del Bienestar es un organismo que atenderá a los mexicanos más vulnerables, y visto así sólo puede pensar en los mejores presagios, señaló.
El Banco de Bienestar llevará a cabo funciones de banca social, prestará servicio a toda la población otorgando prestaciones con menor costo y más competitivas, por lo que su objetivo es promover y facilitar el ahorro, el acceso al financiamiento en condiciones equitativas, la inclusión financiera, el uso y el fomento de la innovación tecnológica. Hay más de mil municipios que no tienen una sucursal bancaria.
Mediante la habilitación de la red de fibra óptica y aprovechando el tendido de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) a través de una empresa filial, es posible la interconexión con 180 mil comunidades que hasta ahora no cuentan con el servicio, así que los municipios y poblados donde hasta hoy no tienen ningún banco comercial, contarán con sucursales lo que facilitará fomentar el crédito al consumo.
Además, el Banco de Bienestar permitirá distribuir y reportar los recursos de programas sociales de dependencias y entidades de acuerdo con la normatividad aplicable, así como las reglas de operación respectivas; igualmente, se establecerán 13 mil sucursales de este banco en todo el País, en contraste con las mil 100 sucursales con las que cuenta actualmente la banca comercial.
Con su despliegue, el Banco de Bienestar podrá movilizar mínimamente hasta 300 mil millones de pesos, pero adicionalmente al extenderse la conectividad se realizará una revolución de las conciencias. Esto es fundamental para el País, porque toda la población tendrá acceso a una corriente impetuosa de información fuera de censura y otros servicios con los que ahora no cuenta.
Es lamentable que el monopolio de la banca comercial, que capta abundantísimos recursos económicos, tenga una visión tan miope en sus servicios. El pago de sueldos y todo tipo de compras mediante tarjetas se ha generalizado, pero los grandes bancos son incapaces de ampliar la red de cajeros, al contrario, los han disminuido, de manera que los trabajadores y todos los usuarios que no cuentan con automóviles tienen que pagar trasporte público, taxis o autobuses, eso ocurre con Bancomer, Banamex, Banorte y otros tantos, que además tienen pésimo servicio a clientes, hay que dedicar horas para hacer un trámite, además, les das tu dinero y no te aportan un solo peso en las tarjetas de débito, pero te cobran hasta 500 anuales por año por darte un plástico.
Por eso, qué bueno sería que el Senado de la República frene los abusos que cobran los bancos por comisiones; todos son bancos internacionales, los gobiernos del Prian les abrieron las puertas alimentando su voracidad.
Por eso el Banco de Bienestar será un oxigenante para el ahorro y el impulso a la economía de las clases mayoritarias. Es preciso frenar las canonjías y beneficios arbitrarios con los que operan las bancas internacionales que sólo esquilman, menoscaban y arruinan a la población, de manera que este banco será de y para el beneficio de los mexicanos.
He visitado algunas cabeceras municipales y la gente no tiene manera de cobrar las ayudas del Gobierno Federal porque no hay cajeros automáticos para percibir sus subvenciones.
El presidente Andrés Manuel está mostrando que gobierna para el bienestar de las mayorías, porque es su deber, una obligación ética y constitucional.