Lo hemos comentado algunas veces, la Ciudad de Linares, por estar atravesada por varios canales de riego que vienen de La Loma en lo que conocemos como «los Siete Chorros», no siempre fue una ciudad a salvo de epidemias.
En 1833, el Cólera Morbus; en 1902, la Fiebre Amarilla, ambas epidemias sembraron de angustia y terror a la población, que entre llantos y lamentaciones hubieron de enterrar sus muertos.
Los canales de riego fueron una preocupación muy especial para don Francisco Flores Saldaña, en su variada y larga época en que estuvo cercana al poder municipal de 1895 a 1909, de manera que en los primeros años del Siglo XIX hubo de emprender una severa campaña de higiene en todos los barrios y sectores de la ciudad para evitar la Peste que sufrió el Puerto de Veracruz en la primera década del Siglo XX.
Y para ello, desde la Alcaldía se formó todo un «batallón» a efecto que la basura no se acumulara en ningún sector de la ciudad; asimismo el contingente de limpieza, uno por uno de los barrios fue atendido en el recogimiento de basura y evitar cualquier posibilidad de una epidemia, lo que se logró afortunadamente con HIGIENE, CON CUIDADO, CON LIMPIEZA en todas las calles de la ciudad.
Roguemos porque esta amenaza o pandemia que nos amenaza con el COVID 19 quede lejana a México y en especial a Linares, y que sus efectos sean vencidos con campañas de salud, de higiene, como ocurrió en Linares en principio del Siglo XX.
No obstante, en ese tiempo hubo más de 600 muertos. ¡¡¡DIOS NOS LIBRE!!