Aprender a ser mujer

¿Para cuándo el novio? ¿Qué no te piensas casar? ¿No te da miedo viajar sola? ¿Piensas tener hijos? Pero ¿por qué te vas a vivir sola? Estás llena de moretones ya cuídate. Trabajas muchísimo ¿a qué hora tienes tiempo? No deberías de ser tan cerrada. Siempre carga con un pepper spray cuando salgas. Deja que paguen por ti, no pasa nada. Si te va tan bien ¿por qué compras ropa de segunda mano? Vístete de la manera en la que quieres que te vean. Ya deja de trabajar ¡Traes una cara! Te estresas mucho porque haces mucho. Qué chula ¿no te quieres ir conmigo? Amiga ¿a dónde vas tan sola?

Estos y muchos otros comentarios son los que he escuchado a través de los años de diversas personas.

A mi aún corta edad, y por mucho tiempo, nunca considere que el hecho de ser mujer me pudiera dar más o menos crédito en este mundo. La igualdad que existía y aún existe en mi cabeza siempre la he considerado de manera en la que ambos géneros tenemos una equidad de oportunidades, y que el esfuerzo que se aporta es lo que define el éxito de cada persona.

El éxito que ha llegado a mi vida hasta ahora no es más que el reflejo de las lecciones, los aprendizajes y el esfuerzo que he aportado para buscar una vida completa en todos los sentidos. En todo esto he pasado a través de grandes experiencias, he viajado por mundo, he estudiado, he trabajado hasta el cansancio, he conocido personas increíbles, he llenado mi memoria de increíbles historias. He caído, me he levantado, he llorado, he gritado, he reído y he tenido un sin fin de grandes momentos.

Hoy, me presento con ustedes como una mujer muy real y transparente:

Soy Bárbara Mendoza Loredo, tengo 24 años, egresada de Negocios Internacionales y actulalmente cursando un diplomado en Finzanas Corporativas, hablo tres idiomas y trabajo en el área financiera de una empresa, tengo un pequeño negocio en línea de repostería, escribo columnas financieras, llevo el marketing digital de una empresa, me involucro y organizo eventos de calidad social en la Ciudad de Monterrey, estoy haciendo mi primer trabajo de consultoría personal para un restaurante nuevo en la Ciudad de Puerto Escondido, Oaxaca, gané una beca para participar como Delegada de México en el Change the World Model by United Nations, un evento de carácter internacional, y soy futura aplicante a la 8va mejor universidad del Reino Unido, según el ranking de QS Top Universities.

Pero también soy Bárbara, una persona que ama viajar, que ama el arte y la lectura, una persona que ama la aventura, que es fanática de aprender cosas nuevas, que no se le da la mucho la monotonía, que ha estado en lugares increíbles pero que también ha tenido que pasar noches en los lugares más inesperados. Que sin música no funciona, que un día tomó sus cosas y salió de su casa sin mucho en los bolsillos, y la vida la fue guiando a grandes lugares. Que está aprendiendo nuevos hobbies, que patina y hace deporte, que sus sueños son llevar oportunidades, educación y trabajo a quien más lo necesita, que actualmente vive a orillas de la playa en gran lugar rodeada de gente increíble de diferentes nacionalidades. Que le gusta la fiesta, que le gusta tomar cerveza y que es amante de la comida, que no hay nada que la hace más feliz que disfrutar de esos pequeños detalles que alegran los días y que le tiene una gran pasión a vivir.

Por mucho tiempo se ha pensado que la vida de una mujer debe ser estandarizada, que el camino no es más ni menos que punto A a punto B: Casarse, tener hijos, ser madre, balancear la familia y el trabajo, ser feliz, ser bonita, estar en forma, vestir bien… no me malentiendan, cada mujer tiene su concepto de vida perfecta y todo tiene su complejidad.

Yo, como muchas otras mujeres que están leyendo esto, han decido romper los estigmas, saltar al vacío con valentía y llevar sus sueños a cabo a través de determinación y la dedicación, de seguir un sueño, de seguir una aventura, de cumplir tus metas, de alimentar tu alma, de dejar todo a un lado y cambiar quien eres. De que todo caiga por un momento y busques nuevas soluciones, ser la protagonista y escritora de cada nueva etapa en tu vida.

¿Que si todo esto es fácil de alcanzar? En lo absoluto, cada camino, cada proceso tiene su tiempo y lleva su propio rumbo, pero como personas y como mujeres tenemos la fuerza y la capacidad para sacar todo eso que nos proponemos adelante, tenemos la oportunidad de empezar desde cero o tal vez de empezar de nuevo. Tenemos el coraje de levantarnos de las caídas, tenemos la referencia de nuestras mayores o nuestras cercanas para darnos una pequeña guía, tenemos la valentía de afrontar comentarios y críticas, contamos con un gran compañerismo que nos hace sentir que no estamos solas.

Día con día a través de los años, las mujeres han luchado por sacar a relucir lo mejor de nosotras por darnos ese gran mérito y crédito que tanto merecemos, porque podemos ser tantas cosas, que lo mejor que podemos hacer es darles el honor y emprender a descubrirnos.

Mujeres, amigas y familia: Con todo el agradecimiento y cariño dedico este escrito a ustedes, a todas esas mujeres que he visto crecer a través de la determinación. A quienes tienen grandes puestos en alguna empresa, a quien comienzan sus negocios, a aquellas que mantienen o están en procesos de crecer sus negocios, a la mujer que está en su taller diseñando y creando una nueva línea de ropa hasta que el sol salga, a la mujer que se encarga de criar a un nuevo ser en este mundo y que hace magia con el tiempo, a la mujer que se está dedicando a crear nueva música y que tiene el sueño de llegar alto. A la mujer que participa en eventos y comunidades sociales, a la mujer que sin miedo se para frente a un juez y lucha por los derechos de otra persona.

A la mujer que hace guardias nocturnas en una planta sin queja alguna, a la mujer que tiene la creatividad para crear material nuevo para redes sociales, a las mujeres en la política, a las mujeres en el medio que hablan con la verdad, a las mujeres que ayudan a las personas a cuidar de nuestra salud física y mental, a las mujeres que hacen deportes extremos y que tienen una valentía increíble, a las mujeres que nos representan en equipos o competencias que pasaron horas entrenando para poder llevar esa gran medalla o trofeo a casa. A las maestras con una gran intención de llevar el conocimiento a sus alumnos, a las madres que nos cuidan cada día, a las abuelas que transmiten su cariño, a las grandes científicas que nos llenan de grandes investigaciones y descubrimientos, a las directoras o escritoras de libros, películas o series que nos atrapan, a las bailarinas que ensayan todos los días y nos hipnotizan con esos movimientos tan precisos, a la mujer aventurera que un día tomó sus cosas y decidió viajar por el mundo para encontrarse.

 A todas y cada una de estas mujeres, les aplaudo y por este medio les expreso que estoy tan feliz de compartir esta pasarela de vida con ustedes, que lo único que hay que aprender es a ser NOSOTRAS MISMAS, a enorgullecernos de lo que somos y cómo somos, a sacar a lucir nuestras capacidades, nuestra inteligencia, nuestro dinamismo, a amar nuestras curvas y nuestras facciones, a entender que somos capaces de todo lo que nos propongamos y que no hay nada más importante que apoyarnos entre nosotras porque todas estamos juntas en esto.

Un año más celebrando una gran fecha, donde año tras año veo y me insipiro en mujeres que destacan en cada cosa que se proponen.

A todas ustedes ¡Gracias por ser mujeres increíbles! ¡Gracias por ser mujeres reales en este Día de la Mujer!