Al gobernador Miguel Riquelme no le ha tocado fácil gobernar, los tiempos “papita” se acabaron, pero una característica que ha predominado en el Gobernador ha sido la templanza.
Destacamos que la templanza es esa virtud que consiste en mantener la calma en situaciones difíciles.
Riquelme ha sacado su templanza en distintas situaciones, donde primero ha destacado que están los coahuilenses…
Como es del dominio público, el pasado 30 de noviembre, el cártel del Noreste invadía Villa Unión, municipio ubicado al norte del estado, que pertenece a la región de los Cinco Manantiales.
Según las versiones, a las 11:45 de la mañana, irrumpieron cerca de 20 a 30 camionetas con 70 a 120 hombres que portaban armas de grueso calibre, llegaron y balearon la Presidencia Municipal y otros lugares, como la iglesia y el centro de salud.
Al poco tiempo, llegaron policías estatales del Grupo de Reacción para enfrentarlos.
Después, llega el Ejército, la Guardia Nacional y la Policía Estatal al apoyo, persiguen a los sicarios para evitar su escape, el enfrentamiento continuaba a la 1 de la tarde de ese día.
A las pocas horas, ese mismo día el gobernador Miguel Ángel Riquelme arribaba a la región, para junto, con el general de la Sexta Zona Militar, el fiscal general y el secretario de Seguridad Pública coordinar las acciones y sacar la amenaza del grupo criminal en Coahuila.
El periodista Jorge Fernández Menéndez, mencionó en su columna, que se publica en diversos medios nacionales: “Si los atacantes de Villa Unión pensaban que iban a ser tratados con la misma indulgencia que los sicarios que tomaron Culiacán, los hechos demostraron que se equivocaban: tuvieron como respuesta toda la fuerza del Estado.
Y esa es la gran diferencia con todo lo ocurrido hasta ahora en la lucha contra los grupos del narcotráfico. Eso es lo excepcional”.
Remata: “No se acaba nunca con el crimen organizado transaccional, pero sí se le puede controlar y constreñir a espacios acotados. Y para eso se requiere una presión constante. Villa Unión demuestra que Culiacán fue un error…”.
Insisto, la templanza de Riquelme, se vio nuevamente. Ese día, rendía su mensaje ante el Congreso del Estado, a las 10 de la mañana, por la tarde, desde el lugar de los hechos, ya transmitía su mensaje y las primeras acciones para salvaguardar la seguridad de los habitantes de Villa Unión. La seguridad de Coahuila, lo hemos dicho, no es de dientes para fuera, es una realidad.
Riquelme demostró su carácter y su manera de gobernar.
PUNTO Y APARTE
Ante críticas hechas por senadores de oposición, quienes cuestionaron al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, durante su comparecencia ante el Senado acerca de que extralimitaba sus funciones “como un vicepresidente”, el canciller rechazó tales afirmaciones.
Yo no tengo funciones de Vicepresidente, dijo, en México no existe el Vicepresidente:
“Soy el secretario de Relaciones Exteriores, tenemos mucho Presidente y no necesitamos vicepresidentes”, aseveró Ebrard Casaubón.
Previamente, la senadora del PAN, Alejandra Reynoso, de manera irónica había señalado que el Canciller llevaba más allá de sus facultades sus tareas y realizaba actividades como “Vicepresidente o Presidente del Exterior”.
En alguna ocasión, mencionamos el activismo que estaba teniendo el canciller Ebrard, pues esa presencia en medios sigue y por lo que se ve, seguirá, no lo pierda de vista, se puede aproximar el delfín de la cuarta transformación.
Buen fin de semana, ¡ánimo!