Recomendaciones de uso y conservación
El producto de mayor calidad es denominado ‘extra virgen’
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), a través del Laboratorio Nacional de Protección al Consumidor, realizó un Estudio de Calidad a 45 productos, de los cuales 11 se denominaron aceites de oliva, 26 aceites de oliva extra virgen, 2 aceites de oliva de orujo y 6 virgen extra ecológico u orgánico.
El artículo publicado en la Revista del Consumidor, del mes de febrero, desarrolló el estudio con base en la NOM-051-SCFI/SSA1-2010, a fin de evaluar que la información del etiquetado sea veraz y no confunda a las personas consumidoras sobre su composición, así como en la NOM-002-SCFI-2011 para comprobar que el contenido neto declarado corresponda a lo manifestado.
En ese sentido, la Dirección de Investigaciones Químico-Biológicas aplicó 2 mil 070 pruebas a 40 marcas para asegurar que cumplan con la calidad, pureza y autenticidad establecidas en la NMX-F-101-SCFI-2012 “Alimentos-Aceites y grasas vegetales o animales-Determinación de ácidos grasos libres-Método de prueba” y en la NMX-F-109-SCFI-2014 “Alimentos-Aceite de Oliva. Especificaciones”.
Los aceites también fueron sometidos a un examen espectrofotométrico en ultravioleta, descrito por el International Olive Council, para conocer la calidad de la grasa ante la oxidación y el deterioro que pueda resultar en un producto rancio.
Entre los que no cumplieron con los parámetros de calidad se encuentran El Olivo, Golden Hills, Inés, La Española, Misión, Olivo del Cielo (tanto de aceituna Arbequina como de Arbosana), Sevillano, Selecto Brand e Ybarra en sus dos denominaciones de oliva extra virgen.
Sin embargo, la Profeco destaca que, una manipulación no adecuada tiene la capacidad de incidir en la calidad del aceite, por ejemplo, almacenarlos cerca de la luz o exponerlos al calor acelerará el proceso de oxidación y, por ende, disminuirá los beneficios en la salud, propios de su naturaleza vegetal. Por lo que será significativo que las marcas cuenten con las especificaciones pertinentes de cuidado al transportarlas y comercializarlas en los establecimientos.
En la cocina, se aconseja utilizar el aceite de oliva, en sus diferentes denominaciones, como un aderezo de ensaladas y pastas, o bien, para conservar alimentos. En caso de freír, lo ideal será mantener una temperatura entre 180 y 200 grados centígrados, así como almacenar el envase en un lugar oscuro y a una temperatura entre 13 y 25 grados centígrados.
Consulta el estudio detallado de la Revista del Consumidor en el siguiente enlace: https://revistadelconsumidor.profeco.gob.mx/edicion/576.